ERA LUNES CUANDO CAYÓ DEL CIELO.

ERA LUNES CUANDO CAYÓ DEL CIELO.
Juan Diego Mejía.
Alfaguara 2008
218 paginas.
Por: Camilo Goelkel Medina

¿Qué pasa por la mente de una persona al momento de suicidarse? Para Juan Diego Mejía parece que nada. O por lo menos eso nos dan a entender sus personajes. Pero no es recomendable creerles a ellos ya que debido a su falta de carácter, personalidad y fuerza narrativa, parece que no tuvieran nada en la cabeza. Los personajes de esta obra del escritor colombiano Juan Diego Mejía parece que están mal desarrollados, el lector nunca llegara a entender sus acciones ni a ellos mismos, a los personajes, sin duda, les falta carácter, les falta ese algo que nos atrapa y nos invita a seguir sus aventuras, en el caso de “Era Lunes Cuando Cayó del Cielo” esto no ocurre.

Pero el verdadero problema de esta novela no reside únicamente en sus personajes. El verdadero problema lo hallamos en la obra entera, en su estructura y en su desarrollo. ¿Acaso usted recuerda la escena de “La Naranja Mecánica” en la cual Alex es forzado a ver una escandalosa secuencia de imágenes que bailan al son de la música de Beethoven? Algo muy similar ocurre con la novela de Juan Diego Mejía. A primera vista bien parece una novela, pero el lector nunca podrá quitarse de la cabeza que, en realidad, lo que esta leyendo parecen forzosamente cuentos. Parecen cuentos que, tal vez, son importantes para el desenlace de la novela, pero que dan la apariencia de un manojo de relatos breves que el autor quiere convertir, a la fuerza, en una novela digna de compararse con las nuevas novelas colombianas.

¿Recuerda usted el efecto que la terapia tiene en Alex? ¿Recuerda que no puede volver a escuchar a Beethoven sin que esto le produzca nauseas? Algo muy similar ocurre con esta novela. El lector se sentirá francamente hastiado debido a que estas novelas nos cuentan siempre lo mismo. ¿Otra novela sobre Medellín? Si. ¿Otra novela sobre muertos en Medellín? Si. ¿Acaso no puede el autor omitir la figura de Escobar que en verdad es completamente inútil en el desarrollo de la novela? No. ¿Qué tiene que hacer Escobar en el desenlace de la historia de Lucia? Parece que nada pero ahí esta ¿Haciendo que? Nadie lo sabe, pero ahí esta, brevemente, pero ahí esta.

Si a los personajes les falta carácter, la historia no se queda atrás. A esta le falta interés, soltura y encanto, en cambio le sobran pretensiones vulgares copias. En muchos aspectos esta novela es una clase se secuela de “Rosario Tijeras”. En muchos, pequeños y grandes, detalles es exactamente igual a la novela de Franco y debido a esto la novela de Mejía carece de interés. El final es previsible desde la primera pagina y si tenemos en cuenta que las 216 paginas entre la primera y la ultima no son mas que cuentos, al lector le bastara con leer la primera y la ultima pagina del libro para enterarse de lo que le ocurrió a Lucia y lo que esto produjo en sus seres cercanos lo cual es otro aspecto mal trabajado por el escritor.

La novela de Mejía carece de fuerza, los personajes están pobremente caracterizados y a la narrativa le falta aquella energía característica de la novela colombiana. En realidad o es un libro de lectura recomendable y que fácilmente puede ser prescindible.

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