Una red poética que nos muestra nuestras raíces

Reseña de La española y el muisca

Por Lorna Gómez 

Querido lector, al confesar que la novela no es mi género favorito, podría pensarse que mi acercamiento a La española y el muisca (2023) de Mariela Vargas Osorno, se ve eclipsado por mi preferencia hacia la poesía; sin embargo, debo hacerle otra confesión: al sumergirme en las páginas de esta obra, descubrí que la poesía se entrelaza con la prosa de una manera cautivante, que guía y transforma la experiencia de lectura. 

    Sin duda, esta novela tejió en mí una red poética llena de hilos de recuerdos, tal vez inspirados por las arañas sagradas (que en la cultura muisca tejían la sospcua zine [1] o balsa que conducían las almas de los muertos al paraíso en el centro de la tierra). Recuerdos que se sienten como observar en primer plano esta red y detenerse en cada hilo narrativo, cada personaje, cada época y ser dirigida por las arañas en una balsa por la historia de nuestras raíces, de mis raíces, a nuevas memorias no contadas.

    Lo poético de la novela brota entre la presencia de palabras y frases, tanto muiscas como españolas, que se entrecruzan en la narrativa. El tejido que propone Mariela Vargas es cuidadoso, delicado y refleja la fusión de culturas, algo que vemos también en la obra cuando los personajes, al igual que las expresiones, se van mezclando y van construyendo una identidad compleja a lo largo de las generaciones. Cada palabra y cada frase se erige como un puente entre dos mundos, entre dos lenguajes, entre dos formas de pensamiento, que al tejerse juntas dan vida a una narrativa rica en matices. Es a través de estas palabras que la novela explora el mestizaje, como lo expresa Miguel Cuxa, uno de los personajes principales de la novela: "ya no somos ni una cosa ni otra... españoles, muiscas; ninguno es lo que fue antes".

    Otro tejido a resaltar es el de la memoria histórica, la novela constantemente introduce elementos culturales e históricos: La Rebelión de los Comuneros, La Expedición Botánica, El asesinato de José Antonio Galán, los refranes, las guabinas, las coplas, el sonido del tiple, el mute y el licor de caña, entre otros, son elementos que resuenan como guardianes de nuestra memoria histórica; este patrimonio cultural se entrelaza con la trama fortaleciendo la conexión entre pasado y presente, haciéndonos sentir en casa. Todos estos elementos nos permiten afirmar con fuerza que seguimos siendo parte de esa "tumbaga" [2] fuerte y nos recuerdan nuestra conexión con la tierra y la historia que moldearon nuestra identidad mestiza.

    Una de las mayores revelaciones que me mostraron las arañas a lo largo de este tejido fue que el viaje y las pruebas que debe enfrentar Cutzo (el último príncipe de Monguí) para llegar al paraíso muisca al principio de la novela son una metáfora de las dificultades que su descendencia tiene que atravesar a lo largo de la novela. La oscuridad profunda que experimentó Cutzo, refleja las sombras que enfrentaron personajes como Miguel, Ignacia, Antonio, Raymundo, Casilda y muchos otros, que tuvieron que lidiar con las dificultades de una sociedad colonial, racista, imperialista y violenta; y tuvieron que defender su identidad y lugar en un contexto lleno de iglesias opresivas, instauración de injustas leyes, violencia física y económica y la constante represión contra líderes que alzaban sus voces por los derechos del pueblo. Al igual que Cutzo, para esta lucha todos tuvieron que vestirse con la fuerza del amor: del amor a la libertad, a la justicia, al pueblo; el amor por lo que somos, por lo que fuimos, por quienes amamos y de quienes venimos.

    El entrelazamiento del desarrollo de los personajes y la trama histórica es otro hilo fundamental para esta gran red, ya que, es también el que más teje acontecimientos históricos y realidades sociales que han marcado nuestra historia; un ejemplo es Miguel Cuxa y su valiente lucha por la verdad y la justicia para el cabildo indígena muisca; otro es Raymundo, su bisnieto, quien lucha contra la persecución de los mestizos, y me recuerda las historias de mi familia, cuando mi abuelo de niño tuvo que huir de su ciudad natal para no ser atribulado por “rebelde y liberal”. Todas estas historias se constituyen como un testigo de las sombras que acechan a aquellos que desafían el statu quo y nos recuerdan las consecuencias amargas de alzar la voz en un mundo que a menudo prefiere el silencio. Mariela Vargas nos invita a confrontar, no solo las batallas personales de los protagonistas, sino también a explorar las cicatrices más amplias de una sociedad marcada por la persecución y la resistencia.

    La española y el muisca es más que una novela para mí. Como ven, esta experiencia de lectura deja en mí el deseo de invitarlo a usted, querido lector, a recordar estas memorias que conforman lo que hoy somos como sociedad. Déjese envolver por estos hilos y recuerde que cada hilo nos permite explorar más nuestra identidad mestiza, nuestra historia no antes contada, nuestra red que conecta culturas, mundos y épocas; y que transmite el cariño por lo que fuimos y por quiénes podemos llegar a ser. “Recuerda quién eres", le dice Bochica al príncipe Cutzo. Querido lector, esta es la travesía que tanto yo, como Mariela Vargas Osorno deseamos que emprendas mientras exploras este fascinante tejido que trasciende generaciones. ¿Te animarías a descubrir más sobre nuestras raíces? ¿Te atreverías a explorar los rincones no revelados de nuestra identidad mestiza a través de estas páginas? y ¿revelar otros secretos que ocultan los hilos de nuestra historia? 

___________________________________________________________________________________

  1. Sospcua zine: (en Muysccubun) Balsas fabricadas con tela de arañas sagradas.
  2. Tumbaga: Aleación de oro y cobre que fabricaban los indígenas orfebres.
Sobre Lorna:

Lorna Gómez (1997), originaria de Bogotá. Desde niña desarrolló interés por múltiples temas, haciendo difícil elegir una sola cosa de tantas, incluyendo pasatiempos, profesiones, canciones o colores. Entre su variedad de gustos en el colegio descubrió la poesía, y es por ella que estudia Literatura actualmente.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Tres miradas en torno a Pájaros en la boca de Samanta Schweblin. Parte II

Reseña Cerezas al óleo